A la hora de reformar una vivienda, son muchos los aspectos que se deben valorar; temas como la distribución de las estancias, la elección de los materiales y acabados o el tipo de aislamiento que se quiere incluir.
Además de los aspectos distributivos del hogar y de las calidades de los materiales, otro de los puntos que se debe tratar al hacer una reforma, es el tipo de calefacción óptimo para cada caso, pues a día de hoy podemos encontrar una gran variedad de modalidades donde elegir, además de distintos combustibles que utilizar para la alimentación de la maquinaria.
En esta entrada, hablaremos acerca de los distintos tipos de calefacción que se pueden encontrar en los hogares a día de hoy, valorando sus aspectos principales.
¿Qué alternativas tengo para la calefacción de mi hogar?
En la actualidad podemos encontrar un gran número de alternativas para la calefacción de las viviendas, siendo las opciones preferidas por los usuarios las siguientes: calefacción por gas natural, calefacción eléctrica, calefacción por otros gases no canalizados y aerotermia.
A continuación hablaremos de cada una de las distintas alternativas para ayudarte a decidir la mejor opción.
Calefacción por gas natural
La calefacción por gas natural es una de las alternativas más populares en nuestro país, puesto que en España existe una gran red de canalización de gas natural que permite llegar a la amplia mayoría de viviendas.
Este suministro es tan popular debido a la gran capacidad calorífica y energética que presenta este elemento, lo que convierte esta energía en una energía segura y económica para los usuarios.
Además, a día de hoy, las calderas de condensación permiten obtener una capacidad de trabajo de valores superiores al 100%, llegando a valores de hasta el 109%, puesto que el vapor residual expulsado en forma de humo en las calderas antiguas es aprovechado para optimizar el trabajo de la maquinaria.
El precio que presenta el gas es variable, siendo siempre más económico que el suministro de luz.
Calefacción eléctrica
Los sistemas de calefacción abastecidos por electricidad son otra de las alternativas más populares en nuestro país, especialmente en aquellos lugares donde las temporadas de frío no presentan unas temperaturas especialmente bajas.
Los beneficios que presenta este tipo de calefacción es que no necesita instalación, pues los aparatos funcionan de manera individual tras conectarse a la corriente, sin embargo, su uso representa un consumo más elevado que los sistemas abastecidos por gas, lo que implica un mayor precio para un mismo resultado.
El precio de la luz, en el último año, ha sufrido un gran aumento, por lo que los consumidores que cuenten con estos sistemas habrán visto incrementar notablemente el gasto asociado al consumo de estos aparatos.
Calefacción por gases no canalizados
Otra alternativa consiste en abastecer las calderas de las viviendas mediante gases como el propano o el butano, que son gases licuables que son fácilmente almacenables y transportables.
Esta alternativa supone una gran oportunidad para localizaciones más remotas que no cuentan con acceso al gas natural y que presentan estaciones especialmente frías.
El suministro de este elemento se realiza mediante diversas formas, como las bombonas de propano o bien se puede optar por la instalación de depósitos individuales o colectivos.
Calefacción por aerotermia
La aerotermia supone sin duda la mejor alternativa para la calefacción de los hogares, pues es un mecanismo que permite el acondicionamiento de las estancias con un consumo de energía inferior al 25% en comparación con las demás fuentes de calor.
La aerotermia trabaja empleando el calor existente en la temperatura ambiental del exterior de la vivienda para transformarlo en energía, empleando únicamente electricidad para hacer funcionar al motor del compresor de la maquinaria.
Es considerada como una fuente de energía renovable y con una gran capacidad de trabajo, pues permite tanto la calefacción durante los meses de frío como la refrigeración durante los meses de calor.
El gran inconveniente que presenta la aerotermia es el desembolso inicial, pues la maquinaria presenta un precio de adquisición elevado, no obstante, ese coste se amortiza rápidamente gracias a los grandes ahorros que permite tanto en calefacción como en climatización.
En conclusión
Todos los modelos presentan ventajas e inconvenientes, por lo que, a la hora de decidir, el aspecto más importante a valorar serán las necesidades de consumo que se presenten en la vivienda. Pues, aunque la aerotermia se presenta como la mejor alternativa, necesita de un gran desembolso inicial, la calefacción eléctrica es una gran alternativa si su uso es poco frecuente o los gases no canalizados suponen una gran alternativa en viviendas situadas en localizaciones más remotas.